La rinoplastia es una de las operaciones de mejora estética más escogida por las mujeres. Un procedimiento quirúrgico que, entre otras cosas, busca mejorar la armonía del rostro. No obstante, en las principales clínicas de cirugía estética, han registrado un aumento significativo del porcentaje de pacientes que también acuden para solicitar presupuesto sobre una rinoplastia para hombres.
¿Qué es la rinoplastia?
Entendemos la rinoplastia como el procedimiento quirúrgico mediante el cual se remodela la nariz de una persona. Aunque estos procedimientos pueden estar vinculados a una necesidad médicas, como mejorar problemas de la función respiratoria, un altísimo porcentaje se somete a esta operación para aumentar la armonía en el rostro; y es que la nariz es un elemento muy importante en esta parte del cuerpo. Por tanto, es comprensible que no sea un procedimiento único y exclusivo de mujeres; y es que, al final, los hombres también quieren verse bien.
La rinoplastia masculina
¿Qué hombres se someten a este tipo de operación estética? Principalmente hombres que no están contentos con su nariz. Para ello, podemos fijarnos en los cánones de belleza dentro del rostro de un varón. Mientras que las mujeres buscan una nariz más fina y pequeña, ellos esperan una nariz recta y ancha, rasgos asociados siempre a un aspecto más “varonil”.
Por tanto, la principal motivación para realizarse una operación de rinoplastia, es la de crear una apariencia más “masculina” en el rostro. Aún así, también podemos encontrar hombres que acuden a las clínicas de estética por otros problemas, como puedan ser una nariz excesivamente grande o bien asimetrías en ella.
Características de la nariz de los candidatos
Hemos comentado que pueden ser varios motivos los que hagan a un hombre someterse a una rinoplastia. Dejando a un lado los problemas respiratorios, que pueden ser esenciales para tomar esta decisión, nos fijamos en las características que la mayoría de hombres que acuden a los centros de estética presentan.
Nos encontramos, por ejemplo, con hombres que tienen problemas con la punta nasal. En estos casos, presentan una nariz demasiado ancha, demasiado estrecha o bien narices caídas o en su defecto demasiado respingonas.
En ocasiones, también encontramos pacientes que cuentan con una nariz con protuberancias en su dorso. Este tipo de protuberancias crean lo que comunmente conocemos como “nariz aguileña”.
Las desviaciones o asimetrías, ya sean de nacimiento o por algún tipo de accidente como un fuerte impacto, pueden desplazar la línea de la nariz en exceso. Esto también sería un motivo por el cual los hombres acuden a un cirujano especializado en rinoplastias masculinas.
Por último, las narices demasiado grandes, si bien es cierto que se asocian a un aspecto más “varonil”, hay veces que se observan demasiado desproporcionadas con el resto del rostro.
Esto deja claro que los hombres también se preocupan por la estética, aunque lo cierto es que las operaciones de nariz no son los únicos procedimientos a los que se someten. Ya desde hace décadas, son cada vez más los hombres que acuden a clínicas para poder realizarse otro tipo de procedimientos, como por ejemplo el lipoláser.
Cómo se practica una rinoplastia en hombres
Si la duda es si las rinoplastias masculinas son iguales que las femeninas, lo cierto es que sí. Es un proceso quirúrgico exactamente igual. Se realiza bajo anestesia general y tiene una duración que puede variar dependiendo de la técnica que se utilice, así como el retoque estético que quiera realizarse.