Las varices suelen aparecer cuando existen problemas de circulación. Y es que el corazón debe impulsar la sangre con una intensidad tan fuerte que el oxígeno y los nutrientes lleguen a través de la sangre a todas las partes del cuerpo.
Debido al mal funcionamiento de algunas venas la sangre no puede circular a través de ellas y se produce un ensanchamiento de las mismas, produciendo las conocidas varices. Estas pueden aparecer entre otros factores por situaciones hereditarias, una vida sedentaria, dieta poco saludable, obesidad, tabaquismo y situaciones hormonales.
Las varices pueden producir calambres musculares, deterioro en las articulaciones y mal funcionamiento en las válvulas de las piernas.
Rebajan, pero no eliminan por completo
Para el tratamiento de las varices existen procedimientos quirúrgicos, pero también remedios naturales que pueden contribuir a su tratamiento. Como veíamos antes, una mala alimentación puede provocar la aparición de varices. Acompañar una dieta con muchas frutas, verduras, mucha agua y dosis de vitamina C serán de mucha ayuda para reducir la presencia de las varices.
Como ves, decimos “reducir la presencia de las varices”, porque con las plantas medicinales que veremos no conseguiremos eliminar del todo las varices, pero sí reducirán su presencia pues te ayudarán a mejorar tu circulación sanguínea. Si no tienes varices pero quieres prevenir su aparición, añadir estas plantas a tu alimentación también te beneficiará.
Castaño de indias y sus propiedades oxigenantes
El castaño de indias es ideal para esto pues la corteza de este árbol posee propiedades antinflamatorias al contribuir a la oxigenación de la sangre. De igual forma, es bueno para el tratamiento de hemorroides, y piernas cansadas (fuente).
Cola de caballo y arándanos secos
La cola de caballo también es buena para la circulación cuando se toma a modo de infusión. También lo son los arándanos secos son perfectos para disminuir la incidencia de las varices; se puede beber a modo de té.
Hamamelis y el efecto de la vitamina P
Por su parte, las hojas del hamamelis poseen flavonoides y taninos, muy buenos para los trastornos circulatorios pues facilita la contracción de los vasos sanguíneos, capilares y venas. De igual forma, contiene la llamada vitamina P, ideal para reducir el tamaño de las venas.
Aloe vera, ajos y cebollas
De igual forma, el aloe es un buen remedio para el tratamiento de las varices como también lo son el ajo y la cebolla, estos últimos se pueden masajear para quitar el dolor que pueden producir esas venas.