En los últimos años el aguacate se ha convertido en una de las frutas más consumidas y requeridas en todos los platos, desde el desayuno hasta la cena. Sus beneficios son incontables, se puede presentar y comer de mil formas diferentes, está exquisito y es el perfecto acompañamiento. ¿Te gusta el aguacate? Entonces no te pierdas este artículo, descubrirás mil razones más para incluirlo en tu dieta.
En primer lugar, el aguacate tiene muchísimos beneficios para la salud: reduce el colesterol y da una dosis extra de energía súper sana, tanto para deportistas como para personas sedentarias. ¡Es esencial en la dieta de una mujer embarazada! El aguacate también reduce el ritmo cardiaco y es extremadamente rico en Omega 3. Esta fruta ayuda al desarrollo muscular de la misma forma que el plátano y hace maravillas con las agujetas y dolores articulares. ¿Necesitas más? Pues es que el aguacate es perfecto para el sistema inmune, para mejorar la visión, para prevenir el envejecimiento y para dar brillo a nuestro cabello (tanto consumido como en forma de mascarilla). Además, todo lo que se dice sobre sus grasas es erróneo: su grasa no es perjudicial y aporta muchísima fuerza.
Otra de las grandes razones para incluir el aguacate en tu vida es su efecto saciante y su alto contenido en fibra, ¡esencial en cualquier proceso de pérdida de peso! ¿Quieres hacerlo? Pues existen mil opciones: crudo en ensaladas o sándwiches, a la plancha con carnes o con verduras, relleno, molido o incluso en puré. Bate juntos garbanzos con aguacate para hacer el mejor hummus que hayas probado. Otra opción es untarlo sobre tostadas, sustituyendo así la mantequilla o la mayonesa que tanto engordan. ¿Necesitas más razones? Pues olvídate de la carne del aguacate y hablemos de su semilla, porque es perfecta para tratar enfermedades gastrointestinales de forma natural y prevenir el envejecimiento prematuro. Tómala molida, en infusiones, rallada o tostada. ¡Qué aproveche!