alisado japones

Alisado japonés: desventajas y consecuencias de su uso en el cabello

Aunque el alisado japonés es una de las técnicas capilares más aplicadas, lo cierto es que no es tan segura como parece. Descubre qué es y cuáles son los pros y los contras de su uso en el cabello.

El pelo liso sigue siendo una de las tendencias capilares más demandadas por las mujeres, aunque en los últimos años las ondas y los rizos han ido ganando terreno. El frizz también es un factor que impide en muchas ocasiones lucir una melena perfecta, por lo que se acaba recurriendo al alisado permanente. Existen varias opciones en cuanto a este alisado (brasileño, de keratina, etc.), pero hay uno en especial que fue una verdadera revolución: el alisado japonés. Sin embargo, no es oro todo lo que reluce y este alisado presenta más desventajas que beneficios.

¿Qué es el alisado japonés y cuánto dura?

El alisado japonés es una de las técnicas más famosas desde hace más de 20 años, cuando surgió en el Japón de los años 90 de la mano de la estilista Yuko Yamashita. Este tratamiento capilar aseguraba dejar un pelo liso extremo durante meses, lo que lo convirtió en la técnica favorita de las famosas de la época.

El objetivo final del planchado japonés es conseguir un alisado definitivo aportando brillo y una textura perfecta que funciona especialmente bien en los cabellos rizados, ondulados y encrespados, pero también en los lisos. Suele ser una opción muy utilizada por aquellas mujeres que usan planchas a diario, ya que se les asegura que pueden olvidarse de ellas durante algunos meses.

La técnica consiste en romper la estructura del cabello mediante productos químicos. El más habitual es el “tioglicolato de amonio”, un tipo de amoniaco muy agresivo con el pelo. El proceso empieza con el lavado del cabello para eliminar la suciedad y aplicar seguidamente un alisante encargado de destruir la estructura interna del cabello para poder moldearlo a su gusto. Tras este procedimiento, se peina, se seca y se deja reposar cerca de dos horas. Es entonces cuando se aplica un neutralizante para frenar la destrucción de la estructura del cabello y se fija la forma deseada mediante planchas.

Aunque existen muchos pros y contras del alisado japonés, lo cierto es que aquellas personas que se someten a este método pueden mantener el pelo liso de 6 a 9 meses, si este se ha realizado de manera adecuada. Eso sí, hay que tener presente que no es un liso permanente, ya que las raíces van creciendo y adoptando su forma original, por lo que es necesario tirar de planchas para mantener todo el pelo en su sitio. No obstante, se recomienda siempre que el alisado japonés lo realice un profesional cualificado.

Principales desventajas del alisado japonés

Hoy en día hay existe mucha controversia acerca de esta técnica. Algunos afirman que no es dañino para el cabello y que sus efectos son duraderos, mientras que otros insisten en que es una técnica muy dañina y que no se consiguen lo efectos deseados. Lo cierto es que el alisado japonés presenta numerosas desventajas que hay que tener en cuenta antes de someternos a él.

Entre las principales desventajas del alisado japonés destaca su potente efecto abrasivo para el cabello. Al utilizar químicos destinados a romper las moléculas del pelo para después reconstruirlo, este acaba debilitándose y presentando a la larga un pelo maltratado y sin brillo. Además, al dejar el pelo completamente liso también se pierde volumen. Todo esto implica que hay que invertir en productos capilares para hidratar y nutrir el cabello, con la intención de evitar que se seque aún más y no luzca bonito.

Por supuesto, no será un alisado definitivo. Sí de larga duración, pero no definitivo. El alisado japonés durará hasta que la raíz vaya creciendo, la cual nacerá con su forma natural. Esto obliga a que se esté continuamente recurriendo a las planchas para igualar el cabello, además de tener que hacer uso de ellas durante los primeros días para reforzar el alisado. Por lo tanto, podemos asegurar que el alisado japonés estropea el pelo y no permite descansar del uso de planchas, pues se deben usar de manera constante.

Otro de los contras que tiene este alisado es que durante el tiempo que dure el tratamiento no podrás cambiar de peinado. Es decir, tu pelo estará siempre liso. Por mucho que intentes ondularte o rizarte el cabello un día o quieras darle un poco de más volumen esto no va a ser posible ya que, al romper toda la estructura interna del cabello desde la raíz, el alisado japonés no nos permitirá hacer ningún cambio. Algo en lo que se diferencia de otras técnicas de alisado que sí lo permiten.

Qué no debes hacer cuando te haces el alisado

Si a pesar de saber todas las desventajas del alisado permanente y las consecuencias que este tiene en el cabello decides realizarte el alisado japonés, es importante que conozcas algunos aspectos de interés para no dañar aún más el pelo. Lo primero de todo es que bajo ninguna circunstancia debemos intentar hacer el alisado japonés en casa. Las consecuencias de esta decisión pueden ser nefastas para nuestro cabello.

Se debe acudir siempre a un profesional que conozca bien la técnica del alisado japonés e inspire confianza. De esta forma, evitamos una agresión mayor del cabello al no utilizar los productos adecuados o no saber trabajar el planchado, tanto si nos la hacemos nosotras mismas como un profesional no cualificado.

Por otra parte, si tienes el pelo decolorado o con tintes debes evitar realizarte el alisado japonés. En el caso de la decoración es importante este dato, puesto que de por sí es una técnica bastante agresiva, por lo que la combinación de ambas puede destrozar el cabello completamente. Aún así, el profesional deberá realizar previamente una evaluación de tu pelo para determinar si es óptimo o no hacer el alisado.

Además, una vez se haya hecho el alisado japonés es imprescindible seguir una serie de recomendaciones con el fin de conseguir mejores resultados:

  • No lavar el pelo durante los 2 o 3 días siguientes a la aplicación del alisado japonés. Los productos aún están activos para mantener la nueva estructura lisa del cabello.
  • No recogerse el pelo los primeros días. De esta forma, evitamos que no surta efecto el alisado.
  • Evitar el uso de productos para el encrespamiento. Al no encresparse el cabello, no será necesario utilizar laca y gomina a diario.
  • Utilizar productos de alta calidad para nutrir e hidratar el cabello liso. Cuanto más naturales y menos abrasivos sean, mucho mejor.
  • Aplicar acondicionador y mascarilla unas dos veces por semana después del champú.

Cómo saber si el alisado está mal hecho

Cuando recomendamos acudir siempre a un profesional que conozca la técnica a la perfección es porque es posible que esta pueda salir mal. Para que el pelo quede completamente liso, este debe plancharse durante y después del proceso de alisado. Si tras finalizar el alisado se distingue de forma vaga el rizo, entonces el alisado no se ha realizado bien. Sin embargo, es importante no volver a hacértelo para intentar solucionarlo, ya que lo único que se conseguirá es debilitar aún más el cabello.

Si, además, te lo has hecho teniendo mechas o con el cabello teñido por recomendación de un profesional y este te ha cambiado el color del pelo, es probable que no te lo hayan hecho bien. Lo mismo ocurre si notas que el cabello se empieza a romper más de la cuenta a pesar de aplicarte los productos idóneos para mantenerlo hidratado. En este caso, si se encuentra el pelo muy dañado, la única solución será cortarlo para intentar sanearlo rápidamente.

¿Cuál es el precio del alisado japonés?

El precio del alisado japonés es bastante elevado, ya que los productos para realizarlo tienen que ser traídos desde Japón y, normalmente, el tratamiento puede llegar a durar hasta seis horas. Por tanto, un alisado japonés rondará de media los 300 euros, aunque variará dependiendo del tiempo que se haya tardado, influyendo la cantidad de cabello, la longitud y otro tipo de factores.

No es aconsejable fiarse de sitios donde el precio del tratamiento sea excesivamente económico. Si se encuentra un lugar donde hagan el alisado japonés barato, lo más seguro es que acabe dándonos problemas en el cabello. Si el tratamiento es abrasivo en un sitio especializado con productos importados de Japón, pensad cómo debe ser en sitios demasiado baratos.

Una vez vistas las ventajas y desventajas del alisado japonés, podéis decidir libremente si queréis probarlo o si preferís decantaros por un alisado permanente menos abrasivo. Uno de ellos es el alisado de keratina, más rápido de aplicar, más barato y menos dañino con nuestro cabello. Así que si tenéis dudas entre el alisado japonés o keratina, es preferible probar la segunda opción.

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